La mañana de este domingo dos hombres fueron localizados sin vida en terrenos de cultivo de la comunidad de El Salado, en el municipio de Tecamachalco, a un costado de la carretera estatal que conecta con Cuacnopalan. Las víctimas fueron identificadas como Fernando P. A. y Andrés, con los mismos apellidos, ambos, según indicaron sus familiares a las autoridades, eran de ocupación campesinos y vecinos de la localidad de Xaltepec, en Palmar de Bravo.
Los cuerpos presentaban huellas de violencia y lesiones producidas por arma de fuego. Además, uno de ellos tenía una playera atada alrededor del cuello y el otro un lazo amarrado en la pierna, signos que apuntan a que habrían sido sometidos y posiblemente torturados antes de ser ejecutados. Personas que pasaban por la zona y el juez de paz del lugar dieron aviso a las autoridades alrededor de las 10 de la mañana.
Elementos municipales acudieron al sitio y confirmaron el hallazgo de los dos hermanos, tendidos entre la tierra blanda del cultivo. Algunas personas ya se encontraban cerca del punto, por lo que fue necesario dispersarlas y acordonar el área hasta la llegada del personal ministerial y pericial.
La escena mostraba dos cuerpos en posiciones similares, vestidos con ropa de trabajo. En el lugar se localizaron casquillos percutidos, los cuales fueron asegurados como evidencia. Tras las diligencias correspondientes, los cadáveres fueron levantados y trasladados al anfiteatro municipal de Tecamachalco para la necropsia de ley.
El caso quedó registrado en la carpeta de investigación FGEP/CDI/CGEIHD/TECAM-I/000567/2025. Hasta el momento no se han dado a conocer móviles oficiales ni posibles responsables. Tampoco se ha revelado si los hermanos tenían alguna amenaza previa o si se trató de un ataque directo relacionado con actividades criminales en la región.
La zona donde fueron hallados los cuerpos es conocida por ser paso constante de grupos delictivos y por los casos recurrentes de homicidios vinculados al crimen organizado. Palmar de Bravo y Tecamachalco han sido, desde hace años, parte de un corredor violento ligado al robo de transporte, huachicol y otras actividades ilícitas.
