Trascendió, por medio de fuentes policiales, que serían ocho los cadáveres localizados en la barranca de Llano Grande, en Cañada Morelos. La cifra surge del registro de ocho números de “desconocidos” abiertos por el personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) tras las diligencias del levantamiento de las bolsas con los restos humanos. Hasta el cierre de esta edición del martes, la Fiscalía no había emitido comunicado oficial. Como móvil se presume una disputa entre grupos criminales.
La zona de Llano Grande se cimbró nuevamente el lunes con un hallazgo aterrador: múltiples restos humanos esparcidos dentro de bolsas negras al fondo de una barranca. El caso, investigado bajo la carpeta FGEP/CDI/CGEIHD/ZACATLAN-I/000617/2025, apunta a un crimen brutal y altamente violento que, de manera preliminar, podría involucrar una masacre con al menos ocho víctimas, según registros policiales y forenses.
El hallazgo comenzó el domingo por la tarde-noche, cuando una llamada anónima alertó sobre bolsas sospechosas ocultas entre la maleza, en el paraje conocido como Los Corrales. Policías municipales confirmaron el reporte y aseguraron la zona, pues los restos se encontraban unos ocho metros barranca abajo, en una pendiente pronunciada.
Las diligencias se extendieron durante la madrugada y la mañana del lunes. Peritos solicitaron apoyo de rescatistas con equipo para descenso vertical debido a lo complejo del terreno. Una vez con luz natural, inició la extracción, documentación y embalaje de los restos.
Diversos indicios revelan la violencia ejercida: Indicio A: extremidad inferior izquierda en reducción esquelética y un botín; Indicio B: torso sin cabeza ni brazo izquierdo, parcialmente consumido por fauna; Indicio C: columna, pelvis y ambos fémures; Indicio D: torso sin extremidades; Indicio E: cráneo y extremidades dentro de una bolsa; Indicio F: extremidades empaquetadas y atadas; Indicio G: restos de torso, extremidades y prendas; Indicio H: un cadáver completo dentro de varias bolsas negras, amarrado; e Indicio I: extremidad superior, extremidad inferior derecha, prendas y más bolsas.
Aunque inicialmente se estimaba un mínimo de tres personas, el registro de ocho números de desconocidos abre la posibilidad de que los restos correspondan a ocho víctimas, y que aún existan segmentos por identificar o relacionar mediante análisis antropológicos, genéticos y osteológicos.
Los restos fueron trasladados al anfiteatro de la ciudad de Puebla, por la relevancia del caso.
VIOLENCIA EXTREMA EN LA REGIÓN
La forma en que los cuerpos fueron desmembrados, embolsados, atados y arrojados evidencia una acción criminal propia de grupos de la delincuencia organizada, quienes se disputan el control territorial. La investigación sigue abierta para determinar la identidad de las víctimas, su posible relación entre sí y el lugar donde fueron privadas de la vida.
Cañada Morelos vuelve a quedar marcada por un episodio de violencia extrema que exige respuestas y justicia, mientras Puebla y buena parte del país observan con horror la contundencia de este crimen.














