El ebrio, conductor de transporte de personal, que el sábado pasado mató a seis integrantes de una familia en Santa María Coronango, fue vinculado a proceso y se encuentra sujeto a la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa, así lo dio a conocer el fiscal general del estado, Gilberto Higuera Bernal.
El fiscal del estado no quiso revelar mayor información a cerca de la los señalamientos precisos en contra de este sujeto responsable de la muerte de seis personas, pero precisó que se le imputa el delito de homicidio, con algunas agravantes. Sin revelar detalles de la formal imputación, enfatizó que la prisión preventiva en contra del conductor de nombre Carlos, es de carácter “oficioso” lo que sugiere que se le puede estar imputando el delito de homicidio calificado.

Los Hechos

El incidente se registró alrededor de las nueve y media de la noche del sábado en la calle Emilio Cortés Gil, cerca de la Escuela Secundaria Técnica número 45. Carlos, el conductor de un camión, embistió un vehículo Dodge, Stratus de color gris, aplastando la unidad con las seis personas que viajaban en ellos. Las víctimas quedaron atrapadas y murieron instantáneamente al quedar el auto completamente destrozado, comprimidos como latas de refresco.

Captura del Responsable

Carlos, de 19 años de edad, intentó huir del lugar, pero fue capturado por ciudadanos indignados antes de que pudiera escapar. Fuentes policiales y ciudadanas confirmaron que el conductor estaba en completo estado de ebriedad al momento del accidente. El fiscal general del estado, Gilberto Higuera Vidal, confirmó que Carlos ha sido vinculado a proceso y se encuentra sujeto a la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa.

Reacción de la Comunidad

La escena en Santa María Coronango, donde fueron veladas las seis víctimas, fue desgarradora. Cuatro ataúdes de adultos y dos pequeños ataúdes de niños llenaron el patio de la casa en que habitaban, sumiendo a la comunidad en una profunda tristeza. El esposo de Gabriela y padre de los dos niños, quien también perdió a sus padres y a su hermana en el percance, enfrenta un dolor inimaginable.

Exigencia de Justicia

La familia de las víctimas clama por justicia, esperando que se aplique todo el peso de la ley al responsable para que las muertes no queden impunes. La comunidad está unida en su dolor y en su exigencia de que Carlos reciba una condena ejemplar.
Este trágico suceso resalta la urgente necesidad de reforzar las medidas contra la conducción bajo los efectos del alcohol y de garantizar que aquellos que cometen estos actos enfrenten consecuencias severas. La esperanza de la comunidad es que este caso sirva para evitar futuras tragedias y para que la justicia prevalezca.