El hallazgo de una camioneta Kia Seltos, abandonada el pasado domingo por la mañana en la 66 Poniente y 23 Norte, cerca del mercado Hidalgo, con tres cadáveres en su interior, está relacionado con la privación ilegal de la libertad y asesinato de César Eduardo, un pseudoempresario vinculado al robo de vehículos con mercancía. El fiscal general, Gilberto Higuera Bernal, confirmó que dos de los cuerpos encontrados tenían ficha de desaparición, lo que ha reforzado la investigación.
El fiscal indicó que el vehículo en el que se encontraron los cuerpos había sido robado durante el secuestro de César Eduardo en Plaza Solesta, cuando fue interceptado por un grupo armado en las inmediaciones del restaurante Mochomos. Un día después, su cadáver fue hallado decapitado y calcinado dentro de un AVEO frente al complejo de seguridad C5, con su cabeza dentro de una hielera a pocos metros del vehículo.
Este hallazgo refuerza la hipótesis de que el grupo delictivo detrás de estos crímenes también está vinculado con el secuestro de seis hombres en Huixcolotla, cuyos cuerpos fueron ejecutados y calcinados en dos vehículos en Santa María Xonacatepec. El fiscal subrayó que la investigación sigue avanzando y que se espera identificar a todos los responsables de estos atroces hechos.
Las autoridades han establecido que los cadáveres hallados en la camioneta y otros crímenes recientes en Puebla están relacionados con una disputa entre bandas dedicadas al narcotráfico y al robo de vehículos, lo que ha incrementado la preocupación por la violencia en la entidad.