La mañana de este miércoles, un grupo delictivo llevó a cabo un violento atraco en las instalaciones del Sam’s Club ubicado en Plaza San Diego, sobre el boulevard Forjadores. De acuerdo con fuentes policiales, los ladrones aprovecharon la llegada del personal para someterlos y ejecutar el robo con precisión milimétrica. El modus operandi fue el mismo utilizado el 20 de mayo para robar el Sam´s de Peri Plaza, por lo que se investiga si la misma banda está detrás de los dos atracos.
El modus operandi fue claro: tras vigilar el lugar, esperaron a que los empleados ingresaran poco antes de las 8 de la mañana. Justo en ese momento, los delincuentes actuaron con rapidez, amagaron a los trabajadores y se introdujeron al establecimiento. Con marros rompieron las vitrinas donde se exhibían teléfonos celulares y se apoderaron de más de 35 equipos de diferentes gamas. Hasta el momento se desconoce el monto exacto del botín.
Luego del atraco, escaparon a bordo de una motocicleta que abandonaron minutos después en el barrio de Santiago Mixquitla. Trascendió que también utilizaron un vehículo sedán de color gris para facilitar su huida, el cual ya es rastreado por las autoridades municipales.
Según reportes extraoficiales la tienda Sam’s Club se negó a entregar de inmediato las grabaciones de sus cámaras de seguridad. El argumento fue que sólo lo harían mediante un oficio formal emitido por las autoridades competentes, lo cual ha complicado las primeras indagatorias.
Cabe destacar que no hubo personas lesionadas durante el atraco, sin embargo, los hechos causaron alarma entre locatarios y vecinos de la zona. Este golpe se suma al ocurrido el pasado 20 de mayo en el Sam’s Club de Peri Plaza, donde se empleó un modus operandi casi idéntico, lo que hace sospechar a las autoridades que podría tratarse de la misma banda criminal.
En respuesta, el ayuntamiento de San Pedro Cholula ha intentado establecer contacto con la administración de Plaza San Diego para coordinar una estrategia de seguridad, pero hasta el momento no han logrado concretar una reunión formal.
Este nuevo golpe deja en evidencia la vulnerabilidad de las grandes cadenas comerciales ante grupos bien organizados, y la necesidad urgente de reforzar la coordinación entre autoridades y sector privado.