Un joven de 21 años de edad fue atacado a balazos la noche del domingo en Atencingo, Chietla, en inmediaciones de la colonia Gustavo Díaz Ordaz segunda sección. Murió en la carretera Izúcar de Matamoros–Atencingo, a la altura de un bachillerato de Colón, cuando era trasladado a un hospital de Izúcar de Matamoros, en un hecho que ya es investigado como homicidio doloso por la Fiscalía. La víctima, identificada como Miguel Ángel V. S., se desempeñaba como chofer y era originaria del municipio de Chietla.
De acuerdo con los primeros reportes, el ataque ocurrió cuando el joven se desplazaba en una motocicleta. Tras recibir impactos de proyectil de arma de fuego, quedó gravemente herido, por lo que fue auxiliado y subido a una ambulancia del SUMA. Sin embargo, pese a los esfuerzos médicos, perdió la vida antes de llegar a un hospital.
Al momento de la intervención ministerial, el cuerpo se encontraba dentro de la ambulancia. Vestía camiseta de tirantes color rojo, pantalón de mezclilla azul —rasgado del lado izquierdo por la atención médica— y tenis grises con suela blanca. Como seña particular, presentaba un tatuaje monocromático en el pectoral izquierdo.
La revisión inicial reveló al menos dos lesiones: una herida en la pierna izquierda, que incluso tenía un torniquete improvisado, y un impacto de bala en el costado izquierdo, a la altura de la región lumbar. Esta última lesión habría sido determinante para su fallecimiento.
Posteriormente, y con base en el testimonio de la pareja sentimental del ahora occiso, las autoridades se trasladaron al punto exacto donde ocurrió la agresión, sobre la misma carretera, cerca de una gasera. En ese sitio se realizó la inspección y el procesamiento de la escena.
Durante las diligencias fueron localizados varios indicios de relevancia para la investigación. Entre ellos, una motocicleta de la marca Italika, modelo RT250, color gris, sin placas de circulación, que habría sido la que conducía la víctima. También se aseguró una maleta azul con la leyenda de una marca deportiva, la cual se encontraba vacía.
Lo más relevante fue el hallazgo de casquillos percutidos correspondientes a munición de arma larga, lo que confirma que el ataque fue directo y con un alto poder de fuego. Estos indicios fueron fijados, embalados y asegurados para su análisis pericial.
El cuerpo fue trasladado al anfiteatro de la ciudad de Puebla para la práctica de la necropsia de ley, mientras que la Fiscalía abrió la carpeta de investigación correspondiente para esclarecer el móvil del crimen y dar con él o los responsables.
Hasta el momento no se reportan personas detenidas. Las autoridades no descartan ninguna línea de investigación, incluido un posible ataque directo, y continúan con las indagatorias para esclarecer este homicidio que vuelve a encender las alertas por la violencia armada en la región de la mixteca poblana.