Un guardia de seguridad fue asesinado de varios disparos la madrugada de este miércoles en el exterior del centro nocturno La Casita, ubicado en la colonia Granja San Isidro, sobre el Boulevard Las Torres y la calle Universidad Autónoma de Yucatán, cerca de Ciudad Universitaria, lugar en el que trabajaba el ahora occiso. La víctima, Mario C. L., de 27 años, perdió la vida frente a su hermano y un amigo (también cadeneros del lugar) tras un violento altercado con cinco violentos sujetos que intentaron ingresar al establecimiento.
El ataque ocurrió alrededor de las 4:50 de la mañana, cuando un grupo de hombres y mujeres llegó en dos vehículos: un sedán blanco, posiblemente un Jetta o Bora, y una camioneta naranja tipo Trax. Al intentar entrar al centro nocturno, fueron rechazados por los guardias porque el lugar ya estaba cerrado. Esto desató una discusión que escaló a golpes y, posteriormente, al homicidio.
Uno de los agresores, que portaba una sudadera azul con la leyenda «BMW», golpeó a César L. C., hermano de Mario. Este último intervino para defenderlo y fue agredido a golpes por el sujeto de playera roja, en ese momento el hombre que vestía sudadera blanca y llevaba un arma de fuego oculta, disparó contra Mario, impactándolo en la cabeza. El joven murió al instante, mientras los agresores escapaban en sus vehículos rumbo a la 14 Sur.
Paramédicos que acudieron al lugar confirmaron la muerte de Mario, mientras policías municipales y estatales aseguraron el área para preservar posibles indicios. El autor del disparo fue descrito como un hombre delgado, de tez morena, de entre 25 y 30 años, con sudadera blanca, tenis negros y pantalón de mezclilla.
La Fiscalía General del Estado inició las investigaciones con base en las descripciones proporcionadas por los testigos, es decir los otros dos guardias de seguridad del centro nocturno. El cadáver fue trasladado al anfiteatro por personal de la Unidad de Traslados y Recuperación de Cadáveres (UTREC).
Vecinos de la zona, quienes pidieron el anonimato, expresaron su preocupación por la violencia recurrente en el bar La Casita. Denunciaron que el lugar ha sido escenario de riñas, balaceras y otro homicidio en el pasado, solicitando a las autoridades el cierre definitivo del establecimiento, destacando que es una zona donde viven y transitan a diario cientos de estudiantes de la BUAP.
El análisis de las cámaras de videovigilancia será crucial para ubicar a los responsables y los vehículos en los que huyeron.