Un duro golpe a la delincuencia organizada se registró en el municipio de Chignahuapan, donde fuerzas federales y municipales capturaron a un ciudadano colombiano acusado de dedicarse a la extorsión de comerciantes de la región.
El aseguramiento se logró gracias a un operativo conjunto en el que participaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, la Guardia Nacional y la Secretaría de Marina. Durante la revisión, el extranjero portaba un arma de alto calibre, lo que incrementa el grado de peligrosidad de sus actividades.
De acuerdo con las autoridades, este hombre se valía de amenazas e intimidaciones para obligar a sus víctimas a entregar dinero a cambio de “protección”. Sin embargo, tras varios reportes ciudadanos y labores de inteligencia, se logró ubicarlo y detenerlo sin que se registraran enfrentamientos.
El sujeto ya fue puesto a disposición de las autoridades competentes. De manera paralela, el Instituto Nacional de Migración (INM) inició los procedimientos legales correspondientes.
La acción fue reconocida por pobladores y comerciantes, quienes habían denunciado la presencia de personas sospechosas en la zona.
Las autoridades recalcaron que continuarán con los despliegues conjuntos para cerrar el paso a la criminalidad, reforzando la seguridad en los accesos carreteros y en los puntos más concurridos de la localidad.