La noche del pasado martes 31 de diciembre, una tragedia ensombreció la víspera de Año Nuevo en la carretera que conecta Amaxac con Santa Cruz, en Tlaxcala. Un conductor de transporte público de la ruta San Lucas-Tlaxcala, presuntamente bajo los efectos del alcohol, embistió a una mujer de 44 años y a su hijo de 15, quienes viajaban en una motocicleta.
El impacto fue devastador. La madre perdió la vida en el lugar debido a la fuerza del choque. Su hijo, gravemente herido, fue trasladado a un hospital cercano, pero pese a los esfuerzos médicos, murió momentos después.
De acuerdo con testimonios, el conductor de la combi habría perdido el control del vehículo por su estado de ebriedad. Tras el percance, huyó del sitio, dejando tras de sí dos vidas truncadas y un inicio de año marcado por el dolor para los familiares de las víctimas.
Elementos de las autoridades tlaxcaltecas acudieron al lugar para realizar los peritajes correspondientes y asegurar los dos vehículos involucrados. Asimismo, se llevaron a cabo las diligencias del levantamiento de los cuerpos, mientras que la Fiscalía General del Estado de Tlaxcala inició las investigaciones pertinentes para dar con el responsable.
La comunidad, conmocionada por el hecho, exige justicia para la madre y el hijo, quienes no pudieron celebrar la llegada de 2025. Este accidente resalta nuevamente el peligro que representan los conductores bajo la influencia del alcohol en las carreteras.
Mientras las autoridades avanzan en las pesquisas, los familiares de las víctimas enfrentan el duelo por una tragedia que pudo haberse evitado.
