La proliferación de vendedores ambulantes no autorizados en la Central de Abasto de Puebla ha generado preocupación entre los comerciantes establecidos, quienes exigen la intervención del Ayuntamiento para retirarlos antes de que la situación derive en un conflicto.
Durante los últimos meses, se ha registrado un aumento considerable de ambulantes en la zona de las naves comerciales, lo que ha generado inconformidad y tensión entre los locatarios. Señalan que este fenómeno ya ha provocado problemas en años anteriores y advierten que, si las autoridades municipales no actúan de inmediato, la situación podría salirse de control.
Los comerciantes argumentan que la presencia de vendedores informales no solo afecta sus ventas, sino que también atrae actividades ilícitas, lo que pone en riesgo la seguridad en la Central de Abasto. Además, recalcan que para poder instalarse en la zona, los comerciantes deben contar con la autorización del Ayuntamiento y de los representantes del mercado, lo cual no ha sucedido en este caso.
La preocupación aumenta debido a que en meses anteriores, la delincuencia en la Central de Abasto derivó incluso en homicidios, lo que llevó a operativos constantes por parte de la policía. Aunque la vigilancia ha mejorado, el crecimiento del comercio informal podría generar nuevamente problemas de seguridad.
Los locatarios que hicieron pública esta denuncia solicitaron permanecer en el anonimato por temor a represalias, pero insisten en que es urgente que el área de Mercados y Normatividad del municipio tome cartas en el asunto para evitar enfrentamientos entre comerciantes y ambulantes.
Hasta el momento, no se ha informado si las autoridades municipales planean operativos para retirar a los vendedores irregulares, pero los comerciantes advierten que, de no haber respuesta pronta, la situación podría derivar en confrontaciones y afectar la estabilidad de la Central de Abasto.