Un inquietante hallazgo sorprendió a vecinos del municipio de Chietla: restos óseos humanos fueron encontrados en el interior de una vivienda ubicada sobre la calle del Hornito, en plena zona centro del municipio. El descubrimiento ocurrió cuando se realizaban trabajos de limpieza en una antigua fosa séptica.
Tras el reporte, al lugar arribaron agentes investigadores de la Fiscalía General del Estado, adscritos a la unidad con sede en Izúcar de Matamoros. Los peritos realizaron las diligencias correspondientes y el levantamiento de la osamenta, que fue trasladada al anfiteatro del Servicio Médico Forense (Semefo) en la ciudad de Puebla.
De manera preliminar, los especialistas determinaron que se trata de una osamenta en muy mal estado, prácticamente deshaciéndose, lo que hace suponer que podría tener entre 30 y 40 años de antigüedad. Es decir, los restos corresponderían a una persona fallecida hace al menos tres décadas.
El cráneo y huesos largos fueron localizados en el fondo de la fosa, y aunque aún no se ha determinado oficialmente el sexo ni la edad del fallecido, ya se iniciaron los estudios por parte del área de antropología forense del Semefo. Estos análisis permitirán conocer detalles clave como la antigüedad exacta, edad aproximada al morir y, en caso de ser posible, el sexo de la persona, lo que podría ayudar a su identificación.
La carpeta de investigación quedó registrada bajo el número FGEP/EAT/FIM/POPULAR-I/022343/225. Hasta el momento, no se ha podido confirmar si se trata de un hecho relacionado con algún delito o si es un caso que ya prescribió por su antigüedad.
Vecinos de la zona expresaron su sorpresa, pues nunca imaginaron que bajo esa vivienda —aparentemente sin antecedentes violentos— pudieran estar ocultos restos humanos. Autoridades continuarán con la indagatoria para tratar de arrojar luz sobre este misterioso caso, que revive viejos fantasmas en el corazón de Chietla.