Un hombre de 34 años sobrevivió de milagro tras ser baleado y arrojado a una barranca en San Martín Texmelucan, para después huir como pudo y llegar hasta el municipio de San Salvador el Verde, donde finalmente logró pedir ayuda. El caso, cargado de violencia y marcado por el consumo de drogas, mantiene una investigación abierta debido a las inconsistencias y lagunas en la declaración del propio lesionado.
Los hechos se conocieron alrededor de las seis de la tarde, cuando vecinos del Camino Real Iztaccíhuatl, en la junta auxiliar de Tlacotepec de José Manzo, interceptaron a elementos municipales para solicitar apoyo urgente. Un hombre lesionado por arma de fuego estaba dentro de un domicilio en la colonia Hacienda San José y requería atención inmediata.
Al llegar, los uniformados encontraron al herido con una visible lesión de bala en el pecho. El hombre llamado Jesús M. M., de 34 años de edad, originario y vecino de la colonia Antorcha Campesina en San Martín Texmelucan, relató que momentos antes había salido a comprar cristal cerca de su casa —reconociéndose adicto— cuando se enredó en una riña con dos sujetos. Durante la pelea, aseguró, ambos lo atacaron a balazos y posteriormente lo arrojaron a una barranca.
Pese a la caída y la herida, dijo haber logrado escapar, subir a un camión de pasajeros y trasladarse hasta la vivienda de un familiar en San Salvador el Verde, donde finalmente pidió auxilio.
Paramédicos de una ambulancia municipal lo trasladaron al Hospital Integral de San Martín Texmelucan. Los médicos reportaron que su estado de salud era estable al momento del ingreso. Autoridades estatales y municipales fueron notificadas para la integración del caso.
La víctima no proporcionó datos sobre los dos agresores ni pudo precisar el punto exacto donde ocurrió la agresión, lo que complica la reconstrucción del hecho. Asimismo, su información personal arrojó homónimos en Plataforma México, por lo que las autoridades deberán confirmar su identidad para continuar con la investigación.
El caso quedó bajo seguimiento ministerial, en espera de que el lesionado se recupere para ampliar su declaración y se determinen las circunstancias reales del ataque.















