Víctor, de 51 años de edad, quien resultó lesionado en la balacera del domingo en la colonia Gonzalo Bautista, murió a causa del balazo que recibió en el pecho.
La violencia que estalló el pasado domingo en la colonia Gonzalo Bautista ya cobró su primera víctima mortal: Víctor F. A., de 51 años de edad, murió la mañana del martes en el Hospital de Traumatología y Ortopedia del IMSS, a causa de un impacto de bala en el pecho. El cuerpo fue entregado este miércoles a sus familiares.
Este hombre era uno de los seis lesionados en el ataque directo a balazos ocurrido en inmediaciones del polideportivo Gonzalo Bautista, donde integrantes de la banda de “Los Greñas” abrieron fuego contra presuntos integrantes de “Los Gordos”, en medio de una disputa por el control de la venta de droga en esa zona de la capital poblana.
De acuerdo con fuentes ciudadanas consultadas —vecinos que conocen a los involucrados—, el objetivo principal del ataque era un joven identificado como Yael H. H., de 23 años, quien fue herido con dos impactos de bala: uno en el abdomen y otro en la pierna.
Los otros lesionados fueron: Yoselin H. G., con un disparo en el cuello; María Asunción G. H., de 54 años, con una lesión en la mano; Alejandro E. C., de 48 años, herido en la espalda y el brazo; Rubén M. D., de 52 años, baleado en el antebrazo.
La situación médica de una de las mujeres heridas es crítica, ya que el disparo que recibió le habría dañado la columna vertebral. De acuerdo con los informes proporcionados por habitantes del lugar, existe el riesgo de que quede parapléjica, por lo que su estado es delicado.
Las mismas fuentes aseguran que algunas de las personas lesionadas no tienen vínculos con grupos criminales, simplemente se encontraban viendo un partido de futbol cuando ocurrió la balacera. Aseguran que varios fueron víctimas colaterales, por lo que piden a las autoridades justicia pronta y castigo para los responsables.
Hasta el momento, no hay detenidos, pero la Fiscalía General del Estado ya inició la carpeta de investigación correspondiente. La expectativa está puesta en las cámaras de videovigilancia privadas, que podrían aportar información clave para identificar a los agresores que huyeron en motocicletas.
