Una tragedia sacudió la mañana de este viernes a la autopista Cuapiaxtla–Cuacnopalan, donde una volcadura dejó como saldo la muerte de un menor de edad y al menos cinco personas lesionadas, entre ellas otros niños. El percance ocurrió a la altura de la comunidad de Limones, en el municipio de Palmar de Bravo.
De acuerdo con los primeros reportes, un vehículo particular volcó de manera aparatosa, quedando completamente destrozado sobre la cinta asfáltica. Dos de los ocupantes quedaron prensados entre los fierros retorcidos, lo que obligó a la intervención inmediata de cuerpos de emergencia y bomberos para poder liberarlos.
Las personas lesionadas fueron rescatadas y trasladadas de urgencia al Hospital General de Ciudad Serdán. Sin embargo, horas después se confirmó el fallecimiento de Eder José G. V., de 11 años de edad, quien presentaba lesiones de extrema gravedad tras el accidente. Pese a los esfuerzos médicos, el menor no logró sobrevivir.
En el mismo percance resultaron lesionados Mia Yadary V, C., de 4 años de edad, quien sufrió fractura en una pierna; Josué Fernando V. C., de 17 años; Celia Itzel V. C., de 22 años; y Yadira C. M., de 45 años. Todos fueron atendidos por paramédicos y trasladados para valoración médica.
El vehículo involucrado es un sedán Renault color gris, el cual terminó volcado tras perder el control mientras circulaba por la autopista. Versiones recabadas en el lugar señalan que al momento del accidente la unidad era conducida por un menor de 17 años de edad, situación que ya es analizada por las autoridades correspondientes.
Ambulancias provenientes de distintos municipios acudieron al sitio para atender la emergencia, mientras que la vialidad permaneció parcialmente cerrada durante las labores de rescate y auxilio, generando afectaciones al tránsito vehicular por varias horas.
El accidente volvió a evidenciar los riesgos de circular a exceso de velocidad o sin las condiciones adecuadas en esta autopista, donde con frecuencia se registran percances de alta gravedad. La muerte del menor ha causado consternación entre familiares y habitantes de la región.
Las autoridades continúan con las investigaciones para esclarecer cómo ocurrió el siniestro y deslindar responsabilidades. Mientras tanto, una familia enfrenta el dolor irreparable de haber perdido a uno de sus integrantes en un hecho que, como muchos otros en carretera, pudo haberse evitado.















