En un violento intento de robo, Ángel Iván M. G., de 43 años, perdió la vida luego de que un grupo de ocho delincuentes ingresara a su domicilio en Bosques de Santa Anita, perteneciente a la junta auxiliar de La Resurrección, Puebla.

El comerciante, conocido por su negocio de venta de refrigeradores usados, recibió a los agresores luego de que estos se hicieran pasar por compradores interesados en adquirir tres refrigeradores, argumentando que planeaban abrir un negocio.

La madrugada del ataque, Ángel Iván, junto a su familia y un trabajador, fue sorprendido por los sujetos armados que intentaron someterlos. En un intento de defensa, el empleado de Ángel Iván recibió un disparo, mientras que su esposa fue sometida y golpeada.

Al presenciar la agresión contra su mujer, Ángel Iván intervino para protegerlos, momento en que los delincuentes le dispararon dos veces: un balazo en el pecho y otro en el abdomen.

Tras el ataque, los agresores huyeron rápidamente sin robar nada, mientras que la esposa de Ángel Iván, al ver la gravedad de las heridas de su esposo y ante la tardanza de la ambulancia, decidió trasladarlo ella misma al Hospital de Traumatología y Ortopedia del Sector Salud en una camioneta Tornado de su propiedad. Sin embargo, al llegar al hospital, los médicos informaron que Ángel Iván ya no presentaba signos vitales, confirmando su fallecimiento a causa de los disparos.

Ante este trágico suceso, se notificó a la Fiscalía General del Estado (FGE), que envió a la Coordinación General Especializada en Investigación de Homicidios Dolosos para realizar el levantamiento del cuerpo y comenzar con las investigaciones correspondientes. En el domicilio de la víctima, los peritos embalaron tres casquillos percutidos y otras evidencias que pudieran ayudar a esclarecer el caso y dar con los responsables.

Este homicidio ha generado conmoción entre los familiares y conocidos de Ángel Iván, quienes lo describen como un hombre trabajador y honesto, dedicado a su familia y a su negocio. Su entorno exige justicia y celeridad en las investigaciones para capturar a los responsables de este acto de violencia.

Cabe mencionar que este es el segundo ataque de este tipo en menos de una semana. Apenas el lunes, en la colonia Maravillas, otro comerciante fue atacado en su domicilio, y su hijo universitario resultó herido de bala cuando intentó defenderlo de un robo. En ese caso, los ladrones lograron llevarse 80 mil pesos en efectivo.

El incremento en la violencia hacia comerciantes ha despertado alarma entre los habitantes, quienes urgen a las autoridades a reforzar la seguridad y evitar que estos crímenes queden impunes.