Muy caro les salió una broma a dos borrachos, padre e hijo. Se les hizo gracioso decir a una persona que secuestrarían o robarían a un par de niños. Los habitantes del barrio de Guadalupe Tlatelpan, en San Francisco Totimehuacán, lo tomaron muy en serio. Una turba de aproximadamente 300 personas salió y les propinó una paliza, amagaban con matarlos pero la policía les salvó la vida.
Ante la alerta que dio la madre de los niños, los vecinos comenzaron a salir y retuvieron el carro del par de hombres. Al tomarlos por secuestradores la lluvia de golpes no se hizo esperar. La gente vapuleó a los que tomó por peligrosos maleantes.
Los más cautos, llamaron a la policía e informaron lo que estaba ocurriendo, les dijeron que llegaran rápido porque la turba pretendía matar a los presuntos delincuentes.

linchados
Esta situación de violencia comenzó a gestarse alrededor de las 22:00 horas del miércoles, en Tlatelpan, ubicado en la junta auxiliar de San Francisco Totimehuacán.
Policías municipales y estatales del Sector 2 acudieron al lugar y trataron de dialogar con la exaltada gente, quienes no ocultaban su ira. Los uniformados no pudieron hacerlos entrar en razón de forma inmediata. Poco después se sumaron elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE).
El diálogo continuó hasta la media noche, mientras tanto, la gente se había ido retirando por goteo a sus respectivos domicilios. Cuando ya quedaban pocos, los cerca de 60 policías – de las tres corporaciones mencionadas – aprovecharon para tomar a los dos hombres y retirarlos.
Esto no fue tan fácil, pues los policías fueron apedreados. Según las fuentes consultadas algunas unidades de la ministerial se vieron dañadas. Una vez que pudieron salir de las calles Benito Juárez entre Emiliano Zapata y Miguel Hidalgo – donde se dio el intento de linchamiento – llegaron frente a la presidencia de Totimehuacán, donde se detuvieron para que los dos hombres vapuleados recibieran atención de los paramédicos de Cruz Roja.
Cabe destacar que no hubo ni una persona que acusara o pidiera proceder en contra de estos dos hombres, uno de 22 años de edad y otro de 59 años, hijo y padre, respectivamente. Por ello quedaron en libertad.
De los dos, sólo el quincuagenario requirió de ser llevado a recibir atención médica. Lo trasladaron al Hospital de Traumatología y Ortopedia del Sector Salud, donde su estado fue reportado como grave pero estable, presentó un traumatismo craneoencefálico, además de múltiples golpes en el cuerpo.