Fueron plenamente identificados los tres hombres ejecutados durante un ataque armado en el puesto de elotes “Chirindongos”, ubicado en la carretera Zacapoaxtla-Zaragoza, a la altura de la comunidad de Nexticapan. Las víctimas fueron José Hugo M. T., de 55 años, quien en el pasado fungió como director del ahora extinto Sistema Operador de Agua Potable de Teziutlán; su hijo Hugo M., M., de 27; y José Antonio R., en el pasado fue parte de Protección Civil Municipal de Teziutlán, y quien en la actualidad presuntamente trabajaba como conductor de Uber, aunque otras versiones señalan que colaboraba directamente con los otros dos hombres.
Los tres occisos, originarios de Teziutlán, conocido como «La Perla de la Sierra», en la Sierra Nororiental, murieron tras ser atacados con rifles AR-15 por un grupo armado alrededor de las 10 de la noche de este lunes. En la escena del crimen, las autoridades encontraron más de 40 casquillos percutidos. Se presume que el ataque fue un ajuste de cuentas entre grupos criminales que operan en la región.
Fuentes policiales revelaron que tanto José Hugo Marín como su hijo contaban con antecedentes penales por delitos contra la salud en su modalidad de narcomenudeo. Además, fuentes policiales señalaron que eran investigados pues se presume que podrían haber estado involucrados con otros delitos como el robo de vehículos con mercancía.
El ataque ocurrió en el negocio «Chirindongos», presuntamente propiedad del expresidente municipal de Zacapoaxtla, Evodio Santos Alejo, lo que ha generado especulaciones sobre las motivaciones detrás del ataque.
Además de los tres fallecidos, un hombre que los acompañaba resultó gravemente herido, mientras que una trabajadora del negocio también fue alcanzada por las balas y fue trasladada al Hospital General de Zacapoaxtla, donde se reporta en estado delicado.
Elementos de la policía municipal y estatal llegaron al lugar para acordonar la zona, mientras que agentes de la Fiscalía General del Estado, a través de la Coordinación General Especializada en Investigación de Homicidios Dolosos, realizaron el levantamiento de los cuerpos e iniciaron las investigaciones correspondientes.
Hasta el momento, las autoridades no han revelado la identidad de los atacantes, quienes huyeron tras cometer el crimen. No se descarta que el ataque esté relacionado con las actividades delictivas y se investiga si formaba parte de una venganza entre grupos criminales que operan en la región.
El incidente ha generado gran conmoción en la comunidad de Nexticapan y en Teziutlán, donde las víctimas eran conocidas. Se espera que las autoridades emitan un comunicado en las próximas horas para dar más detalles sobre este hecho violento que ha sacudido la Sierra Nororiental. Las investigaciones continúan y no se descartan más detenciones en los próximos días.
