La irresponsabilidad de los propietarios de un perro causó la muerte del canino. El peludo era mantenido en la azotea de un domicilio de la calle Prolongación de Corregidora en Huauchinango.

El animal cayó desde un segundo piso y tocó cables de alta tensión. En una horrible y triste imagen, el perrito quedó mordiendo uno de los cables y atorado entre otros más. Así, colgando del cableado es como lo encontraron los bomberos y elementos de Protección Civil de Huauchinango, quienes no pudieron hacer nada por el “lomito”, pues la descarga eléctrica acabó con su vida.

Vecinos de la zona indicaron a las autoridades que el animal aparentemente vivía en el abandono en la azotea del citado domicilio.