La mañana del sábado, cuatro cadáveres fueron hallados en una fosa clandestina ubicada en el domicilio número 8817 de la calle San Antonio, en la colonia Miguel Hidalgo. Las víctimas —dos mujeres, un hombre y un cuerpo segmentado cuyo sexo aún no se determina— estaban maniatadas y enterradas en el lugar. Este macabro hallazgo generó conmoción entre los vecinos.
Este descubrimiento fue resultado de las investigaciones que realiza la Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada de Personas y Desaparición Cometida por Particulares.
Elementos de esta dependencia llegaron al inmueble cerca de las 8:30 a.m. del sábado, acompañados por agentes de la Policía Estatal, Policía Municipal, Guardia Nacional y el Ejército Mexicano. La intensa presencia de las fuerzas del orden despertó preocupación y desconcierto entre los residentes, quienes observaron de cerca la diligencia que se prolongó por varias horas.
De acuerdo con testimonios de los vecinos, el inmueble es frecuentemente arrendado, y en los últimos meses había sido ocupado por distintas personas. La última familia que habitó el lugar estuvo conformada por un hombre, una mujer y una niña, quienes se mudaron hace aproximadamente un mes y abandonaron la casa sin previo aviso.
Sin embargo, la atención de los residentes se centra en un grupo de individuos que se instalaron hace seis meses, quienes levantaron una barra alrededor del terreno y mostraban conductas extrañas.
Los vecinos señalan que estos sujetos recibían numerosas visitas nocturnas, con personas que llegaban en diferentes vehículos, y alzaron una estructura que obstaculizaba la vista hacia el interior de la propiedad, lo que levantó sospechas en la comunidad. De acuerdo con fuentes policiales, las características de los cuerpos y la disposición de la fosa sugieren que las víctimas podrían haber sido ejecutadas como resultado de ajustes de cuentas.
El inmueble ha sido asegurado mientras las autoridades esperan realizar los estudios forenses necesarios para determinar el tiempo de muerte, posibles causas del deceso y cualquier rasgo fisonómico que facilite la identificación de los cadáveres, que permanecen en calidad de desconocidos.
Hasta el momento, las autoridades no han emitido un comunicado oficial, pero se espera que en los próximos días se brinden detalles adicionales sobre las líneas de investigación y se refuercen los protocolos de seguridad en la zona.