Verónica Inés fue liberada el pasado lunes tras ser detenida de manera injusta y sufrir torturas a manos de elementos de la Fiscalía General del Estado de Puebla.

Su caso ha provocado indicación ya que la mujer fue arrestada el 21 de octubre en su lugar de trabajo por más de 20 policías ministeriales, quienes la subieron a patrullas sin una orden clara ni lectura de sus derechos.

En una entrevista a nivel nacional, Verónica relató haber sido llevada a un terreno para ser golpeada y amenazada; los agentes le colocaron una gorra en la cabeza y la agredieron físicamente mientras le exigían información sobre un supuesto secuestro relacionado con un iPhone encontrado en Tehuacán.

Después de horas de sufrimiento y falta de pruebas en su contra, fue llevada a Fiscalía en donde permanecio varias horas, posteriormente fue liberada reconociendo que no tenía vínculo alguno con el caso de secuestro.

En la entrevista dijo que existe la posibilidad de que inicie una denuncia en contra de los agentes que la golpearon, ya que ella brindó toda la información necesaria, destacando que el teléfono lo tuvo siempre prendido y que incluso pudo contactarse con la mamá del dueño del teléfono para entregarlo, lo cuál ya no pudo ser posible porque fue cuando inició este martirio.

Además de los golpes, dijo estar dañada psicologicamente por todo lo que vivió estos días, por lo que espera, se haga justicia.