Lo que comenzó como un llamado de auxilio en la comunidad de Analco, Chignautla, terminó en una persecución armada y en la captura de presunto un violador que, en su huida, intentó asesinar a policías municipales.
El hecho se registró el pasado lunes, cuando una llamada telefónica alertó a las autoridades sobre la violación de una mujer en dicha localidad. De inmediato, unidades de la policía municipal se desplegaron en la zona y, con las características aportadas por los testigos, montaron un operativo de búsqueda que permitió ubicar al probable responsable sobre un camino vecinal.
Al verse rodeado, el sujeto identificado como Adolfo M., de 40 años y vecino de Tételes de Ávila Castillo, sacó un arma de fuego y abrió fuego contra los oficiales. Uno de los proyectiles alcanzó a un uniformado, quien cayó herido en cumplimiento de su deber.
Los policías repelieron la agresión, logrando neutralizar al atacante, que quedó tirado sobre el pavimento. Paramédicos de Protección Civil acudieron rápidamente: trasladaron al elemento herido al Hospital General de Teziutlán, mientras que el detenido recibió atención en el lugar antes de ser internado bajo custodia.
La víctima del abuso sexual reconoció plenamente a Adolfo como su agresor, confirmando lo que ya era evidente para los investigadores. El hombre enfrenta acusaciones por violación, tentativa de homicidio, portación de arma de uso exclusivo del Ejército y los delitos que resulten.
Cabe señalar que versiones difundidas en redes sociales intentaron generar alarma al asegurar que el policía lesionado se encontraba en estado grave, lo cual fue desmentido por fuentes oficiales. El uniformado fue atendido y dado de alta horas más tarde, situación que confirma que su vida nunca estuvo en riesgo.
Este caso dejó claro que la oportuna reacción de los cuerpos de seguridad evitó que el agresor quedara impune. Sin embargo, también expone la violencia con la que actúan algunos delincuentes que no dudan en atacar a la autoridad para evadir la justicia.
El detenido fue dado de alta del hospital al día siguiente y remitido ante el Ministerio Público, que es la autoridad que integra la carpeta de investigación que lo llevará ante un Juez de Control. En Chignautla, la población exige castigo ejemplar para que hechos de esta naturaleza no queden sin respuesta.
