Un músico fue asesinado a balazos en la comunidad de Cuamila en el municipio de Tlaola, fueron los propios vecinos los que se organizaron para la búsqueda y posteriormente localizaron al hombre muerto, con al menos cinco balazos en el cuerpo. El finado fue localizado en un camino de terracería que conduce de Tlaola a Cuamila.

El ahora occiso fue identificado como Fabián M. R., de 29 años de edad, quien era originario y vecino de esa comunidad, quien era casado y tenía una hija de apenas 6 años de edad.

El sábado alrededor de las cinco de la mañana los familiares de Fabián por medio del perifoneo comenzaron a vocear que el hombre no había llegado a su casa y por ello pedían la colaboración de los vecinos para que los ayudaran en las labres de búsqueda. Decenas de vecinos de Cuamila se unieron a esas labores de búsqueda.

A esa hora, una mujer de nombre Victoria salió a caballo para dirigirse a su trabajo, para ello tomó el Camino Real a Cuamila, y fue a la altura del paraje conocido como La Tranca, donde se percató que yacía el cuerpo de Fabián, su vecino, por lo que de inmediato avisó a su esposo y este fue a dar informes a los deudos,

Los lugareños procedieron a dar aviso a las autoridades policiales de aquel municipio enclavado en la Sierra Norte del Estado. Trascendió que el hombre era músico y salía a trabajar a diversas comunidades de la Sierra Norte.

Agentes ministeriales de la Coordinación General Especializada en Investigación de Homicidios Dolosos y peritos en criminalística de la Fiscalía General del Estado (FGE), llevaron a cabo las diligencias del levantamiento del cadáver y dieron inicio a las investigaciones de rigor.

Familiares del occiso mencionaron a las autoridades que desconocen la mecánica de los acontecimientos y el posible móvil del crimen. Refirieron que Fabián no tenía problemas con nadie, pues por su oficio de músico se llevaba con muchas personas y recorría toda la región.

Los primeros reportes indicaron que el cuerpo presentaba cinco impactos de arma de fuego en la cabeza, pecho, piernas y en uno de los brazos. El cadáver fue llevado a un anfiteatro de la Sierra Norte para que se le practiquen los protocolos de necrocirugía.

En el lugar de intervención se localizó un casquillo percutido de calibre 9 milímetros y una ojiva, los cuales fueron embalados como indicios, se espera que aporten información valiosa a las indagatorias.