Un adolescente fue ejecutado de un balazo en la cabeza en el interior de la tienda Todo Barato, en la unidad habitacional Agua Santa, al sur de la ciudad de Puebla. Fuentes policiales y ciudadanas indicaron que todo apunta a que se trata de un ajuste de cuentas entre grupos delictivos dedicados a la venta de drogas; aunque el joven entró gritando a la tienda pidiendo ayuda y diciendo que lo querían asaltar.
Fue minutos antes de las ocho de la mañana de este viernes cuando los propietarios de la tienda y vecinos reportaron que habían matado a un chavo con un balazo en la cabeza. Los hechos ocurrieron en el negocio señalado ubicado en la 115 Poniente esquina con la 9 E Sur, de Agua Santa. Al llegar los paramédicos, confirmaron que el hombre ya había perdido la vida.
El occiso es un adolescente de 16 años de edad, el cual minutos antes escapaba corriendo, pues era perseguido por un hombre armado. El chico, intentando salvar su vida, y por ello ingresó corriendo a la tienda Todo Barato (una miscelánea).
Pero eso no detuvo al sicario, el cual ingresó y al tenerlo a corta distancia le disparó en la cabeza, después el sujeto tomó una bolsa que el ahora occiso llevaba con él y escapó a toda velocidad, algunas versiones señalan que lo esperaba un cómplice a bordo de una motocicleta, en la cual escaparon.
En un primer momento se indicó que el móvil del crimen pudo ser el robo, porque supuestamente el joven dijo al ingresar a la tienda que lo querían asaltar y por la bolsita que el sicario se llevó.
Sin embargo, esa versión quedó opacada por otra línea de investigación más fuerte, la que apunta que se trató de un ajuste de cuentas entre grupos de narcovendedores que operan en esa zona de la ciudad de Puebla.
Algunos vecinos indicaron de manera anónima a este diario que en la unidad habitacional Agua Santa han aumentado los asaltos en todas sus modalidades, además de que la venta de drogas en la zona es descarada, se hace a plena luz de día ante la vista de todos.
Incluso indicaron que cerca del lugar donde ocurrió el homicidio hay unas casetas donde existen micronegocios, pero donde también se comercializan drogas. Los colonos presumen que los policías de todas las corporaciones conocen esa información, pero no hacen nada para capturar a los narcovendedores, que a su vez son los generadores de violencia.
Los colonos esperan que después de esa ejecución se refuerce la presencia policial en la unidad habitacional y que las investigaciones del caso permitan capturar a los delincuentes que operan en Agua Santa y sus alrededores.
