Una gran fuga de gas causada por una toma clandestina en el ducto de Pemex en el camino a las válvulas, en San Cristóbal Tepatlaxco, ocasionó que el carburante llegara hasta la zona residencial de la colonia La Purísima. Fue cerca de las 05:15 horas cuando los vecinos empezaron a percatarse del olor a gas y por propia iniciativa comenzaron a evacuar sus casas. A todos los volvió a la menoría el terrorífico 19 de diciembre del 2010, cuando una toma clandestina en el oleoducto provocó una fuerte explosión e incendio que acabó con parte de la ciudad y decenas de vidas humanas.
El olor a gas era sumamente intenso, tanto que picaba la nariz, relataron los pobladores. Quienes sin pensarlo y sin esperar la respuesta de las autoridades, salieron a sus casas para buscar un lugar más seguro. Incluso quienes despertaron primero tocaron las casas de sus vecinos para dar la alerta.
Poco después Ana Lucia Hill, coordinadora de Protección Civil en el Estado informó que Seguridad Física de Pemex confirmó que se trataba de una fuga de gas en una toma clandestina, minutos después se daba la ubicación exacta de la fuga.
Los cuerpos de rescate, Protección Civil, Bomberos, Pemex, y autoridades policiales y militares, acudieron a atender la emergencia. Se recomendó no encender nada, para evitar una ignición y también se pidió que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) suspendiera el suministro de energía eléctrica para evitar un accidente. Sobra decir que se formó un cuadrante de seguridad en donde se prohibió la circulación vehicular.
Unas horas después, a las 11:20 horas la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSP) emitió dos mensajes en su cuenta oficial de Twitter @SSPGobPue, en donde informaba que la toma clandestina ya estaba sellada en su totalidad “dejando el lugar sin riesgo para la población”.
La dependencia destacó la coordinación entre el personal de la Policía Estatal, Bomberos, Pemex, Guardia Nacional y Protección Civil del Estado, así como la policía de Texmelucan.
Cabe hacer mención que el clamor de los pobladores es que las autoridades acaben con los grupos criminales dedicados al robo de gas, pues exponen a toda la comunidad a una tragedia como la ocurrida en diciembre del 2010.
