La familia de Juan Carlos, el joven atropellado por el conductor del Mercedes Benz, no está dispuesta a negociar con el asesino de su ser querido, por lo que podría ser anulada la suspensión provisional que concedió un Juez de Control el pasado viernes por la tarde. Cabe destacar que el gobierno del estado se ha acercado a los familiares del joven fenecido para brindarles asesoría legal.

El pasado viernes por la tarde un Juez de Control concedió a Yamil, el imputado de homicidio culposo, la suspensión provisional del proceso por 30 días. Ello después de que el Ministerio Público y el abogado de la familia exhibieran una carta de consentimiento firmada por el papá del ahora occiso para que se estableciera un acuerdo reparatorio. Sin embargo, jamás le explicaron al papá de Juan Carlos en qué consistía la carta que firmó, es decir que Yamil quedaría libre.

Ante la inconformidad de la familia por la decisión tomada por el Juez de Control de conceder la suspensión del proceso por 30 días para buscar el acuerdo reparatorio, el gobierno del estado se acercó con los deudos para brindarles asesoría en la materia.

Ante esa inconformidad de los deudos, el Tribunal Superior de Justicia y la Fiscalía General del Estado (FGE) deberán reiniciar el proceso penal en contra de Yamil a quien se le imputa el delito de homicidio a título de culpa.

Cabe destacar que en todo momento la familia de Juan Carlos ha sido clara, no quieren dinero a cambio de la vida de su hijo, sino que el asesino pague en prisión. Otra inconformidad que han hecho patente a lo largo de la semana es que los peritajes no mencionen que Yamil iba alcoholizado, aseguran que eso es lo que les indicaron en un primer momento los policías y los testigos en el lugar de los hechos.

Abogados consultados señalaron que el delito de homicidio culposo (como lo es por atropellamiento) tiene un castigo de 3 a 5 años de prisión. Esa sanción les permite a los imputados buscar un acuerdo reparatorio, es decir no es obligatorio ir a prisión. Conducir en estado de ebriedad es un agravante en estos casos, lo cual aumenta la sanción de 3 días a 2 años de prisión. En el caso del conductor del Mercedes Benz no se comprobó que al momento de cometer el atropellamiento estuviera alcoholizado. Si la familia no acepta el acuerdo reparatorio tendría que pagar la pena señalada de prisión, aunque también podría gozar de conmutar la prisión por otra medida cautelar, probablemente el pago de una sanción económica.