Fue esclarecido el homicidio de Hugo Leonardo, conocido como El Hojalatero, quien fue asesinado el 23 de febrero del presente año, en la colonia Gustavo Díaz Ordaz, en Atencingo, en el municipio de Chietla. En horas recientes, gracias a las investigaciones del Grupo de Apoyo Policial de Chietla, se logró ejercitar acción penal en contra del presunto asesino.

Por medio de los actos de investigación de los agentes ministeriales de la Comandancia de Chietla, se pudo determinar que quien mató a Hugo Leonardo, fue un sujeto de nombre Ángel Saúl V. C., alias El Pepus, de 24 años de edad.

Luego de las acciones de búsqueda y localización, se logró ubicar al homicida en la colonia La Cruz, en calle Miguel Hidalgo, en inmediaciones del conocido Puente Pelón, el cual cruza el río Nexapa.

Los agentes ministeriales, al tenerlo a la vista se entrevistaron con él, y al corroborar que se trataba del sujeto sobre quien pesaba la orden de aprehensión, procedieron a dar cumplimiento al mandato judicial.

El Pepus fue trasladado ante el Juez de Control para que en las próximas horas se lleve a cabo la audiencia inicial, en donde escuchará la formal imputación que le realiza la Fiscalía General del Estado (FGE), y será en esa misma audiencia, o si así lo decide, después de la ampliación del plazo constitucional, cuando se conozca si queda o no vinculado a proceso y bajo qué circunstancias.

Como este diario lo informó, el pasado 23 de febrero, vecinos de la calle Guadalupe Bastieri de Molina, de la colonia Gustavo Díaz Ordaz Segunda Sección (más conocida como colonia Obrera Segunda Sección), en Atencingo, llamaron al Hugo Leonardo, más conocido como El Hojalatero – por ser ese su oficio – y le indicaron que un presunto ladrón había ingresado a su taller.

El hombre se desplazó hasta el lugar, iba acompañado de un amigo. Al llegar a la dirección señalada, corroboró que había un delincuente en el interior, escondido en uno de los carros. Le gritó que llamaría a la policía, el delincuente disparó contra los dos hombres. Hugo Leonardo murió minutos después en la Clínica 25 del IMSS ubicada en Atencingo, y su compañero resultó herido.

El delincuente escapó, pero pudo ser identificado. Luego de las investigaciones del crimen, tres meses después la Fiscalía General del estado pudo aprehenderlo para iniciarle el proceso por homicidio calificado. Fuentes ciudadanas indicaron que es necesario indagar más sobre el maleante, pues podría estar involucrado en otros crímenes ocurridos en la región.