Un operativo fallido de la Unidad Especializada en la Investigación de Delitos Sexuales y Trata de Personas, del al Fiscalía General del Estado (FGE), causó momentos de tensión en el Centro Histórico. Los agentes se llevaban, supuestamente rescatadas a 16 sexoservidoras, pero mujeres miembros de un colectivo de defensa de sexoservidoras evitaron que se las llevaran.
Lo anterior ocurrió en la tarde noche de este jueves, en la 12 Poniente entre la 5 de Mayo y 3 Norte, en el Centro de la ciudad. Los agentes de la Fiscalía contaron con el apoyo y resguardo de la Policía Municipal de Puebla.
De acuerdo con la información extraoficial del caso, los agentes realizaron dicha acción para combatir el delito de trata de personas en la modalidad de prostitución ajena. Trascendió que habrían localizado y “rescatado” a 16 mujeres que prestaban sexoservicio en el lugar. Todas ellas fueron ingresadas a tres camionetas tipo Van de la Fiscalía.
Sin embargo, un grupo de activistas que protegen a las sexoservidoras, llegaron hasta el lugar y solicitaron a los agentes que mostraran la orden correspondiente, aparentemente no contaban con ella y por eso exigieron que sus compañeras fueran liberadas. Fue así como no permitieron que el personal de la Fiscalía se retirara hasta que dejara libres a las mujeres.
Mariel, líder del colectivo Chicas de la 14, acusó ante medios de comunicación que la incursión de los agentes fue violenta. Fue ella quien confirmó que los agentes se llevaban a 16 chicas y a los encargados de un hotel ubicado en esa dirección.
“Las golpearon y subieron a unas camionetas supuestamente por trata de personas, pero nosotras trabajamos por nuestra voluntad y necesidad, nadie nos obliga y por eso no hay trata, ya basta de malos tratos de las autoridades y ahorita mismo nos vamos a la Comisión de Derechos Humanos para presentar nuestra queja” señaló la líder de Chicas de la 14.
Mariel también indicó que las autoridades ministeriales se llevaron las credenciales de elector de las 16 chicas mencionadas, por lo que señaló que temen por su integridad física.
