Son dos cabezas humanas, de hombre y mujer, las encontradas la mañana del domingo en San Nicolás Tenexcalco, en el municipio de Chietla, hasta el cierre de esta edición el resto de los cuerpos no habían sido localizados. Cabe señalar que junto a la bolsa que contenía las dos cabezas se encontró una cartulina amarillo fluorescente, la cual contiene un narcomensaje amenazante a delincuentes que operan en aquella región.
Los occisos fueron reconocidos por sus seres queridos como Agustín M. C., de 39 años de edad, y Santa E. M., de 32 años de edad, el primero tenía su domicilio en la exhacienda Jaltepec y la mujer en la colonia Morelos.
De acuerdo con las primeras investigaciones y las declaraciones hechas por los familiares, la última vez que vieron con vida a Agustín fue el sábado por la mañana cuando salió a trabajar al campo. A partir de ese momento no lo volvieron a ver, hasta el domingo por la tarde que al saber que habían encontrado dos muertos en Tenexcalco acudieron a pedir informes.
Fue así como los familiares pudieron reconocer una de las cabezas como correspondiente a Agustín. Sus familiares dijeron a las autoridades desconocer si estaba metido en asuntos delictivos.
Mientras que los familiares de Santa también acudieron con las autoridades tras perder comunicación con ella y saber del hallazgo de las cabezas. Luego de reconocer a su familiar, indicaron que lo último que supieron es que salió de su domicilio en la colonia Morelos cuando Agustín pasó a recogerla el sábado cerca de las nueve de la noche, se fueron en una moto conducida por él.
Las autoridades de la Fiscalía General del Estado presumen que se trata de un ajuste de cuentas entre grupos de la delincuencia organizada que operan en aquella región del estado.
AMENZAN A MANDOS POLICIALES
Fuentes policiales informaron a este diario que en aquel municipio también fueron encontradas otras cartulinas en donde amenazan a mandos regionales de la Fiscalía General del Estado, así como a elementos de otras corporaciones policiales. Las fuentes aseguran que en dichos mensajes se hace referencia a presuntos vínculos de autoridades de la Fiscalía y otras autoridades policiales con un grupo de la delincuencia organizada procedentes del estado de Guerrero.