Una familia fue encontrada muerta en el interior de su domicilio en el municipio de Epatlán (en la región de Izúcar de Matamoros), la escena fue sangrienta. Las autoridades presumen que el hombre mató a su esposa de un escopetazo y después él se quitó la vida con la misma arma.
El viernes cerca de las nueve de la noche dos niños, hermanitos, de 10 y 9 años de edad, salieron de la casa muy asustados y llegaron hasta el domicilio de una vecina en donde le contaron que su papá había matado a su mamá.
Así fue como dieron aviso a algunos familiares y a las autoridades. En el interior de la casa, en el área de la cocina, yacía boca abajo una mujer de nombre Patricia, se presume que al ser asesinada con un escopetazo en la cara tenía en brazos a su pequeña hija de 5 meses de nacida, por lo que al caer por el balazo aplastó a la pequeña y murió asfixiada.
A unos metros de los cadáveres de la mujer y la bebé, en la cama yacía boca arriba el esposo de nombre Paulino, de 36 años de edad. También él presentaba un escopetazo, pero a la altura del cuello.
Llamó la atención de las autoridades que en el lugar no se encontraba el arma homicida, lo cual desconcertó a la policía, y se presume que alguien inconsciente o conscientemente había alterado la escena. Posteriormente, luego de una búsqueda en el lugar, la escopeta fue localizada al igual que los cartuchos percutidos.
ANTECEDENTES
Patricia era originaria y vecina de Izúcar de Matamoros, antes de relacionarse con Paulino tuvo un matrimonio previo donde procreó a los dos niños de 9 y 10 años de edad. Ella se dedicaba a vender tortillas en Izúcar.
Posteriormente inició una relación con Paulino, por ello ella y sus hijos se fueron a vivir a Epatlán. Pero Paulino partió a trabajar a Estados Unidos, en donde ya había estado en otra ocasión. Cuando se fue Patricia estaba embarazada, esperaba una bebé hija de ella y Paulino.
El hombre volvió hace algunos meses. De acuerdo con fuentes extraoficiales, algunas personas le comenzaron a meter ideas de que su esposa se seguía viendo con su ex y que la bebé no era su hija.
LA PRINCIPAL LÍNEA DE INVESTIGACIÓN
Las autoridades presumen que Paulino se dejó llevar por esas versiones y que el viernes, pudo haber amagado a su esposa con el arma para exigirle respuestas. La mujer tenía a la bebé en brazos, por ello creen que el hombre no disparó de manera intencional, sino que al estar reclamando y con el cañón de la escopeta cerca del rostro de Paty, se le escapó el tiro.
La fémina recibió el escopetazo directamente en el rostro, el cual le quedó desfigurado, la mujer cayó boca abajo y encima de su bebé. Se presume que el hombre desconcertado por lo que había ocurrido fue hasta la cama, en donde después de ver lo que había ocasionado decidió quitarse la vida y se disparó en el cuello con la misma arma. En el lugar se encontraron los cartuchos percutidos.
Los dos hijos de Patricia, hijastros de Paulino, habrían sido testigos de esta cruel escena, después de la cual escaparon de la casa y buscaron ayuda con algunos vecinos, así fue como la tragedia quedó expuesta.
UNA SEGUNDA VERSIÓN
Algunos familiares de los occisos contactaron con medios de comunicación locales y les indicaron que ellos sospechan que un familiar de Paulino los mató por la disputa de una herencia (terrenos) y por un fuerte adeudo que tenía con el ahora occiso. Sin embargo, esta versión no ha sido retomada por las autoridades.
Las investigaciones de este terrorífico acontecimiento están a cargo de personal de la Fiscalía General del Estado del grupo Izúcar de Matamoros. Hasta este domingo por la noche no había alguna versión oficial de lo ocurrido, se espera que en cuanto haya mayor información la Fiscalía pueda dar a conocer detalles de los resultados de las investigaciones.
