Odilón Larios Nava. – Terrible muerte tuvo una mujer, de 42 años de edad, en la comunidad de Santiago Yancuitlalpan, en el municipio de Cuetzalan del Progreso. La mujer fue asesinada a machetazos, en la cabeza y el cuello, principalmente. Fuentes policiales confirmaron que la mujer no fue decapitada, como había sido difundido en noticias fake por redes sociales.

La mujer asesinada de esta brutal forma fue identificada como Rosa V. H., de 32 años de edad, quien vivía en una parte muy marginada de la comunidad antes mencionada, en donde ni siquiera hay servicio de energía eléctrica.

El crimen ocurrió la noche del lunes, mientras que, por lo apartado del terreno y la falta de luz eléctrica, hizo que las diligencias del levantamiento del cadáver se culminaran hasta este martes, para que las autoridades ministeriales se pudieran auxiliar con luz de día.

Se desconoce quién o quiénes atacaron a Rosa, la identificación del homicida u homicidas, será parte de las indagatorias que lleven acabo las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE). Hasta el momento de redactar esta nota informativa, tampoco se conocía las hipótesis sobre el posible móvil del aparente feminicidio.

Las investigaciones del caso recaen en los agentes investigadores y los peritos criminalistas de la Fiscalía General del Estado. El caso ha causado mucha indignación entre los habitantes de Cuetzalan, por lo que exigen una pronta investigación, para que se dé con el paradero del responsable (o responsables) y se aplique todo el peso de la ley.

Otras voces también señalan al presidente municipal Gerson Calixto, de ser incapaz de contener la ola de violencia que azota aquel municipio y sus comunidades, en donde la violencia de género, aseguran pobladores, es una constante.

Hasta el cierre de esta edición periodística no había ningún posicionamiento oficial sobre este caso, se espera algún reporte de las autoridades para conocer detalles del triste y lamentable hecho que costó la vida a Rosa, de origen indígena y quien hablaba una lengua originaria.