Los dos trabajadores que perdieron la vida en la explosión de la Fiscalía General de la República delegación Puebla fueron sepultados este lunes en dos panteones del sur de la ciudad de Puebla. En esta ocasión las familias se reservaron dar declaraciones, quisieron que todo fuera más privado después del intenso dolor que han atravesado los últimos cuatro días.

Juan, de 45 años de edad, fue velado en la colonia Guadalupe Hidalgo, donde tenía su domicilio. Cerca del mediodía de este lunes fue sepultado en el panteón de esa misma colonia. Un pequeño cortejo fúnebre lo acompañó hasta su última morada.

Mientras que un poco más tarde fueron sepultados los restos de Martiniano, de 49 años de edad, en el panteón Jardín, ubicado también al sur de la ciudad de Puebla.

Las familias permitieron a los medios de comunicación acompañar a los cortejos y tomar imágenes, pero dijeron que no darían entrevistas para respetar esos momentos de duelo en que despedían a sus seres queridos.

Cabe señalar que en declaraciones previas, las familias han resaltado su exigencia de justicia para que quien resulte responsable sea sancionado por las muertes de estos dos hombres, y que la FGR otorgue una indemnización justa, que realmente sirva a las familias para sustentarse.