Familiares de personas en situación de reclusión en el penal del Acapulco -donde por la mañana se registró una supuesta riña entre los mismos internos, la cual dejó un saldo preliminar de 5 personas muertas- derribaron una malla perimetral para intentar ingresar a él y tener conocimiento de sus parientes.
Lo anterior debido a que autoridades estatales, municipales y del mismo centro penitenciario no han ofrecido detalles sobre lo ocurrido en el penal, pues incluso no han dado los nombres de las personas que resultaron lesionadas o de las que fallecieron en los hechos.
A pesar de que las decenas de personas lograron derribar un segmento de la malla ciclónica, policías antimotines los detuvieron y les impidieron el acceso al inmueble.
Previamente los familiares realizaron una protesta en la calle Almendros afuera del reclusorio, para reclamar por la falta de información a más de 12 horas de ocurridos los hechos violentos que acabaron con la vida de 28 personas.
Debido a ello, las personas exigen la presencia de autoridades de Derechos Humanos o del director del penal, toda vez que denuncian, los policías estatales que resguardan los alrededores del penal sólo les toman fotos y videos.