Odilón Larios/@Odylarios
Tremenda sorpresa se llevó un hombre al llegar a su casa en el fraccionamiento Renacimiento, pues encontró muerto a su hermano de 25 años. El occiso estaba amordazado y amarrado de pies y manos, además tenía un cintillo en el cuello, y en el lugar donde yacía se apreciaba un profuso lago hemático.
Lo anterior lo informaron fuentes extraoficiales, los cuales señalaron que los padres del ahora occiso – de la tercera edad – salieron de viaje a Acapulco, Guerrero, por ello no se encontraban en casa. Braulio el hermano, había salido y regresó a la casa hasta este domingo a las 13:00 horas, que fue cuando descubrió que su hermano había sido asesinado.
Por las circunstancias antes expuestas Alexander, de 25 años – quien estudió en una costosa universidad privada de Puebla y actualmente trabajaba en una empresa aseguradora – se quedó solo en su casa y se desconoce con certeza qué fue lo que ocurrió en los minutos previos a ser asesinado.
El fraccionamiento cuenta con una caseta de vigilancia en su acceso por la Calzada Zaragoza, por lo que se espera que las cámaras de seguridad y los vigilantes puedan aportar alguna información que pudiera servir para identificar a los homicidas.
Se sabe que el hombre habló por teléfono por última vez con una de sus amigas alrededor de las once de la noche del sábado y que minutos más tarde envió su último mensaje. Lo que ocurrió después con Alexander es materia de investigación de la Unidad Especializada en Investigación de Homicidios de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Se presume que, entre las once de la noche del sábado y las primeras horas del domingo, Alexander fue asesinado. Fue agredido, sometido y asesinado, se sabe que tenía una lesión sangrante a la altura de la cabeza y que en el cuello tenía un cintillo, con el cual probablemente lo estrangularon.
Fue hasta la una de la tarde del domingo cuando Braulio llegó a su casa – ubicada en la Calzada Zaragoza a la altura de la calle Tintoreto, en la zona cercana a Plaza Loreto – con intención de prepararse unas palomitas, cuando notó que había unas bolsas tiradas en la cocina, quiso saber dónde se encontraba Alexander y le marcó, entonces es cuando lo encontró muerto en las escaleras.
Al descubrir esta tremenda escena el hermano llamó a las autoridades, acudiendo paramédicos y policías municipales, además de la Guardia Nacional. Fueron los técnicos en urgencias médicas los que confirmaron que el hombre estaba muerto.
Es por ello que se aseguró el inmueble y después se permitió que los agentes investigadores se encargaran de llevar a cabo las diligencias del levantamiento del cuerpo y de iniciar las investigaciones del caso.
Fuentes extraoficiales indicaron que los padres del ahora occiso son propietarios de una flotilla de taxis los cual les reditúan ingresos económicos considerables, por ello de manera inicial se manejó el robo como probable móvil del crimen. Sin embargo, en la casa no hacían falta objetos de valor, solo el automóvil Ibiza, color plata, propiedad de Alexander, por lo que las autoridades se inclinan a pensar que el móvil puede ser uno distinto que el robo.
