Un hombre que vivía en situación de calle pereció por causas naturales en la vía pública en la colonia Solidaridad, ubicada al norte de la ciudad de Puebla, en los límites con Tlaxcala. Llamó mucho la atención que su fiel escudero, un perro mestizo resguardaba su cuerpo y literalmente no se le separó hasta que las autoridades lo retiraron.

Cerca de las seis de la mañana de este martes un vecino al pasar por la calle Revolución entre Soberanía Nacional y Justicia Social se percató que el hombre estaba tendido en medio de la calle.

El vecino pensó que el hombre estaba dormido, para evitar que algún auto fuera a atropellarlo, intentó despertarlo moviéndolo. Al ver que el hombre que vivía en la indigencia no reaccionaba, se dio cuenta que estaba muerto y avisó a los números de emergencias.

Policías municipales al llegar se encontraron con un hombre inerte, cubierto con una cobija, se presume que la muerte lo sorprendió durmiendo. Encima de la cobija estaba echado el perro que acompañó al varón literalmente hasta su muerte.

Poco después los técnicos en urgencias médicas de Protección Civil Municipal de Puebla confirmaron que el varón estaba muerto. El sitio fue asegurado por la policía municipal y se solicitó la intervención de la Fiscalía General del Estado.

De acuerdo con los vecinos, al hombre fue visto con vida, deambulando por el lugar una noche antes, como intentando encontrar un lugar donde resguardarse de la lluvia que cayó el lunes. Lamentablemente, unas horas después, ya por la mañana del marte lo hallaron muerto.

Al finado solo lo conocían como El Loco, quien contaba entre 50 a 60 años de edad. lo conocían porque solía deambular por la zona, llevando con él siempre a su fie acompañante, el perro café que ahora se quedó sin su humano.

Las diligencias del levantamiento del cadáver estuvieron a cargo de la unidad de investigación de homicidios de la Fiscalía General del Estado (FGE). El cuerpo fue llevado al anfiteatro, pero en caso de que no sea reclamado por algún deudo su destino será la fosa común.