Los juniors montoneros y golpeadores, conocidos como Los Porkis Poblanos, son buscados en todo el país e incluso en el extranjero, la Fiscalía General del Estado (FGE) ya emitió una ficha roja a la Interpol para tratar de dar con los prófugos estén donde estén. Lo anterior lo dio a conocer el fiscal general, Gilberto Higuera Bernal, quien además señaló que los abogados de los imputados están buscando recursos legales para proteger a sus clientes, es decir están buscando ampararse, pero la Fiscalía procederá contra ellos.

En la rueda de prensa de los jueves, el fiscal del estado, indicó que las órdenes de aprehensión están vigentes. Señaló que el caso fue esclarecido y ahora solamente falta dar cumplimiento a la captura de los imputados.

Cabe resaltar que, la madrugada del pasado sábado, el joven Ernesto Calderón, fue agredido dentro de un bar de la zona de Angelópolis, donde los juniors rijosos le habrían lanzado una bebida a él y la joven que lo acompañaba. Después de reclamarle lo agredieron en el exterior, en las inmediaciones de la Estrella de Puebla.

La golpiza fue grabada con un celular y horas después se hizo viral en redes sociales. En el video quedaron grabados los rostros de los golpeadores y por ello la Fiscalía General del Estado obtuvo órdenes de aprehensión contra los siete agresores, todos mayores de edad.

Coral Zavaleta, abogada de la parte agraviada, señaló que en una semana tendrán resultados médicos que le practicaron a Ernesto y así sabrán la estrategia que seguirán legalmente. La abogada señaló que “no todo se arregla con dinero”, haciendo alusión a que los abogados de los imputados han buscado a la familia de Neto para ofrecerles un acuerdo económico.

Higuera Bernal fue claro al señalar que, pese a las argucias jurídicas de los defensores de los imputados, darán con el paradero de los siete y los presentarán ante la autoridad judicial para proceder conforme a derecho.

Cabe destacar que, este caso acaparó los reflectores de la prensa nacional, pues se generalizó la indignación en contra de los cobardes actos de los juniors golpeadores.