Las personas que el pasado lunes sustrajeron un cadáver de una unidad de la Fiscalía General del Estado (FGE) en San Miguel Canoa, entendieron que estaban cometiendo varios delitos y finalmente accedieron a entregar el cuerpo de su familiar a las autoridades para que se continúen con los actos de investigación de rigor.

Como lo informó este diario, el pasado lunes antes de las diez de la mañana, Ismael, de aproximadamente 20 años de edad, apodado el Güero, fue asesinado en la calle Solidaridad, en la colonia Tlapacoyan. Cuando los agentes ministeriales y peritos de la FGE estaban realizando las diligencias del levantamiento del cadáver, los familiares y un grupo de vecinos impidieron que se concluyeran dichas acciones.

El grupo de personas sustrajeron el cuerpo que ya se encontraba en a bordo de la Unidad de Traslados y Recuperación de Cadáveres (UTREC) y lo retiraron en la batea de una camioneta particular. De tal forma que las autoridades ministeriales tuvieron que retirarse sin concluir las diligencias.

Finalmente, después de conocer los impedimentos que iban a tener para sepultar a su ser querido, y de saber que estaban incurriendo en la comisión de varios delitos, la familia decidió entregar el cadáver la mañana de este martes.

De este modo las diligencias pueden continuar y el cuerpo les será entregado legalmente una vez que se concluya la necropsia del caso.

Cabe señalar que, de acuerdo con versiones de vecinos de Canoa, el ahora occiso andaba en malos pasos, incluso lo relacionan con hechos delictivos recientes, por lo que presumen que el móvil pudo ser un ajuste de cuentas.