Se confirma que la muerte de Pablo G. H., en los separos de la policía municipal de Huauchinango se debió a un homicidio. Los familiares del occiso señalan, basados en los resultados de necropsia, que la muerte ocurrió debido a una golpiza que presuntamente le propinaron los policías del municipio que preside Rogelio López Ángulo. En estos casos la Fiscalía General del Estado (FGE) inicia investigaciones de oficio, por lo que se espera el reporte oficial de dicha institución.

Este medio informó ayer de la muerte de Pablo, de 39 años de edad, quien ahora se sabe fue detenido el pasado lunes por la tarde, fue acusado de robar un perro, sin que se conozca mayores características de dicho can.

Sin embargo, Pablo no fue llevado ante el Ministerio Público, sino que la policía municipal de Huauchinango, procedió en su contra solo por una falta administrativa. El ayuntamiento de Huauchinango no ha especificado por qué fue de esa manera si se le acusaba del delito de robo.

La esposa del ahora occiso, señaló ante medios locales que, Pablo fue detenido y que acusaba haber sido golpeado por los policías, pero ella no tuvo dinero para pagar la multa por la supuesta falta administrativa, así que pablo debió quedarse arrestado.

Sin embargo, la mañana del martes le fueron a notificar que su esposo había muerto, supuestamente por una causa natural, precisaron un poco más, incluso le dijeron que aparentemente había broncoaspirado. Y esa fue la versión que el ayuntamiento de López Ángulo dio a los medios locales que replicaron lo anterior.

Pero al ayuntamiento de Rogelio López Ángulo le salió el tiro por la culata, pues los resultados de la necropsia (dada a conocer por la ahora viuda a medios locales), revela que Pablo sufrió una muerte violenta. Y al estar bajo el resguardo de la policía municipal cuando ocurrió lo anterior, todo hace presumir que las lesiones que lo mataron fueron causadas por los policías municipales.

La necropsia reveló que Pablo murió por: “hemorragia cerebral y contusión profunda de abdomen con estallamiento de bazo”, según se lee en el dictamen de necropsia dado a conocer por la viuda a medios de comunicación. El dictamen fue emitido por el médico legista de aquella región.

El municipio no ha informado si ya puso a disposición de las autoridades ministeriales a los policías implicados en estos hechos presuntamente delictivos.