Terrible muerte tuvo un trabajador de la empresa Dulcet, ubicada en el parque industrial San Lorenzo Almecatla, en el municipio de Cuautlancingo. Estando en el tercer turno, por la madrugada de este jueves cayó a un molino y perdió la vida. El hermetismo con el que los directivos de la empresa trataron el caso causó mucha molestia entre los familiares del ahora occiso.

El finado llevaba por nombre José Alberto, quien contaba apenas con 20 años de edad. Llevaba dos meses trabajando en esa empresa ubicada en Río Lerma número 10, en San Lorenzo Almecatla, el parque industrial que se encuentra frente de la puerta 3 de Volkswagen, pero del otro lado de la autopista México-Puebla.

De acuerdo con otros trabajadores, quienes además son familiares de José Alberto, en dicha empresa no cuentan con las medidas de seguridad necesarias, y señalan que eso fue lo que causó el mortal accidente laboral.

Los familiares, en entrevista, indicaron que desconocen la forma en cómo ocurrió el siniestro que cobró la vida del joven, pues aseguran que los encargados de la empresa les negaron la atención.

Los seres queridos de José Alberto se enteraron de lo ocurrido ya por la mañana de este jueves. Hubo molestia porque al acudir a la empresa los directivos y encargados les negaron el acceso y no les dieron información.

Por otras personas se enteraron que José Alberto había caído a un molino y de esa forma habría sufrido una terrible muerte. Su tío, quien trabaja en la misma empresa, indicó que José Alfredo no tenía nada que hacer en ese lugar porque ese no era su trabajo, pero indicó que es común que en la empresa manden a los trabajadores a realizar labores que no les corresponden y para las cuales no están capacitados.

La Fiscalía General del Estado (FGE) envió agentes y peritos para realizar las diligencias del levantamiento del cadáver. En dichas diligencias el personal de la Fiscalía estuvo auxiliado por bomberos del estado, quienes se encargaron de extraer el cuerpo del molino.

Familiares del joven fallecido solicitaron que se haga justicia y que la Secretaría del Trabajo realice una revisión de la empresa para verificar que esté operando con las medidas de seguridad necesarias.

Cabe señalar que José Alberto era soltero y llevaba apenas dos meses laborando en dicha empresa. En entrevista con este diario, su abuelita mencionó que tienen su domicilio en Sanctorum, Cuautlancingo.

Los familiares esperan que las autoridades impartan justicia en este caso, cerciorándose de que la empresa compense económicamente a los deudos, y que realicen revisiones en las instalaciones para verificar que se cuenten con las medidas de seguridad y que no vuelva a ocurrir un siniestro similar.