Odilón Larios/@Odylarios
Un violento enfrentamiento entre presuntos delincuentes y pobladores de la comunidad de Apango, en el municipio de Acajete, contra elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y la Guardia Nacional, provocó la movilización de fuerzas del estado y de la federación.
Mención especial merece que la policía municipal de Acajete – que siempre ha brillado por su incapacidad y complacencia ante la delincuencia – informó a elementos militares que sus “mandos” les ordenaron solo vigilar qué hacía el Ejército, pero no brindarles ayuda. Lo cual causó suma molestia entre los uniformados castrenses, quienes indicaron a este diario la conveniencia de que el gobierno del estado y la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Fiscalía General de la República (FGR) realice una investigación a las autoridades de ese municipio donde han abundado las irregularidades.
Los hechos se registraron alrededor de las 17:30 horas de este lunes en la 17 Norte esquina con calle Reforma de la junta auxiliar de Apango – donde según algunos pobladores de Acajete y Tepeaca, se resguardan varias bandas delictivas –, cuando un grupo de delincuentes respaldados por pobladores llegaron a agredir a los elementos de castrenses.
Los soldados se encontraban en dicha comunidad resguardando una bodega de 100 por 50 metros, en donde ubicaron vehículos y mercancía presumiblemente de procedencia ilícita. Por ello desde la mañana del domingo la SEDENA y la Guardia Nacional resguardaban el sitio, en espera de la correspondiente orden de cateo, confirmó en un comunicado el gobierno del estado de Puebla por medio de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSP).
Fue este lunes, a la hora señalada cuando el grupo de delincuentes y pobladores atacaron a pedradas y palos a los elementos del Ejército Mexicano, además se indicó que el grupo de agresores detonaron armas de fuego.
Reportes policiales indicaron que no hubo lesionados por proyectiles de arma de fuego en ninguno de los dos bandos. En un video difundido en redes sociales se ve cómo un grupo de personas agreden a los soldados y cuando son repelidos con los mismos palos y piedras escapan, después se escuchan disparos y se ve a la gente correr.
Luego de ese enfrentamiento la gente comenzó a tocar las campanas de la iglesia, pues aparentemente pretendían organizarse para enfrentar a las autoridades castrenses, sin embargo, el personal de la SEDENA solicitó el apoyo correspondiente.
Como ya se mencionó acudieron en apoyo personal de la Policía Estatal por tierra y por aire con los helicópteros de la Dirección de Servicios Aéreos del estado de Puebla, así como la Policía Federal y más elementos de la Guardia Nacional.
Ya se mencionó más arriba la molestia de algunos elementos castrenses a quienes policías del municipio de Acajete les indicaron que las órdenes que les dieron sus mandos fueron vigilar a los soldados, pero no auxiliarlos.
La población de Apango quedó sitiada por las autoridades policiales y castrenses en espera de que se otorgue la orden de cateo y así poder hacer la revisión del lugar y determinar qué cosas de procedencia ilícita se resguardan en el lugar.
Personas oriundas del municipio y de los municipios vecinos, en entrevista con este diario confiaron: “En Apango las cosas están muy cabronas, pero muy cabronas, está lleno de delincuentes”.
