Los empleados del lugar apoyaron a las mujeres y llamaron a la policía; los dos agresores están detenidos.
Las agraviadas temen que las autoridades ministeriales dejen libres a los agresores porque la médico legista dice que no hubo violación.
Al menos otra mujer ha identificado a uno de los detenidos como su agresor, por lo que no se descarta que se trate de violadores seriales.

Dos mujeres fueron víctimas de violación el primer día que (por problemas económicos) se desempeñaban como “escorts”. Los hechos ocurrieron la madrugada del jueves pasado en una de las habitaciones del motel Faraón en la ciudad de Puebla. Gracias a la intervención de los empleados del lugar, los presuntos violadores fueron capturados y se encuentran a disposición del Ministerio Público, sin embargo, las dos agraviadas tienen fundados temores en que los delincuentes queden libre por falta de una investigación a fondo de las autoridades ministeriales.

En entrevista con Karla N., una de las mujeres que fue víctima del ataque sexual, los hechos ocurrieron la de siguiente manera. Ella y otra mujer, ambas madres solteras, actualmente atraviesan una dura situación económica, por ello decidieron contactar a una mujer que en Facebook “solicitaba chicas para su agencia de escorts”, después se contactaron con la supuesta mujer por medio de Whats App.

“Era la primera vez que íbamos a hacer eso, pero es por necesidad. Ambas somos mamás solteras”, indicó Karla. Fue entonces cuando el miércoles por la noche la supuesta administradora de la agencia de escorts a la que conocen como Maryfer González, les indicó que había un servicio de chicas en el motel Faraón, ubicado en la 32 Poniente casi esquina con el bulevar 5 de Mayo.

Ellas llegaron al lugar a las 21:30 horas del día señalado. En la habitación había un solo hombre, quien inicialmente les dijo que solo quería platicar y les contó un cuento de que tenía una enfermedad terminal. Les invitó a tomar y a fumar. Posteriormente llegó un segundo sujeto, un poco más joven que el primero.

Las chicas estaban en el lugar hasta ese momento por su voluntad, sin embrago, empezaron a preocuparse porque la mujer que las contrató, la supuesta, Maryfer González, no les había hecho la transferencia económica por sus servicios, como previamente habían acordado. Llegó el punto que esa supuesta mujer dejó de responderles.

Fue en ese momento, cuando ellas intentaron irse del lugar. Karla mencionó en la entrevista telefónica con este diario, que cuando intentaba marcharse el primer hombre la jaloneó y obligó a sentarse; ella forcejeó y él la amenazó diciendo que era un peligroso narcotraficante. Después la llevó hasta la cama en donde le arrancó algunas de sus ropas y consumó la violación el primer sujeto; ese sujeto también la golpeó y le hizo sangrar la nariz.

El segundo hombre que llegó al motel abusó sexualmente de la otra mujer en la misma habitación. En cierto momento el segundo hombre también fue con Karla para abusar de ella. Ese instante lo aprovechó la otra mujer, quien logró escapar de la habitación y pidió ayuda a los empleados.

Los empleados del lugar acudieron a la recámara para auxiliar a las chicas, a la vez que otros llamaban a la policía. Las mujeres se vistieron como pudieron, fueron asistidas por el encargado del lugar y una de las mujeres que alistan las habitaciones.

Cuando salieron de la recámara la policía municipal ya estaba afuera y ante el señalamiento de lo ocurrido y el existir flagrancia, procedieron a detener a los agresores quienes se identificaron como Roberto L. A., y Alfredo B. R. Estos presuntos violadores fueron trasladados a Rancho Colorado en la dirección de policía municipal y después remitidos ante las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE).

Las agraviadas procedieron a presentar la denuncia correspondiente en la carpeta de investigación 889/2021 de la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia de Género Contra las Mujeres, en la Unidad de Investigación Especializada en Delitos Sexuales y Ciber Acoso.

Las mujeres agraviadas recibieron atención médica y la médico legista de la Fiscalía les realizó los exámenes correspondientes. Incluso, señalan, la Ministerio Público les tomó declaraciones en tres ocasiones.

Karla y la otra mujer dicen estar muy preocupadas, porque con todo lo que declararon y las pruebas en contras de los agresores, la médico legista les indicó que no presentaban huellas de violación, por ello temen que dejen libres a los agresores.

Cabe destacar que Karla, señala que después de la captura de estos sujetos, se presentó otra mujer que identifica a uno de ellos como el agresor que la violó en el mismo lugar. Por lo que no se descarta que pudiera tratarse de violadores seriales que utilizan el ya descrito modus operandi.

Otra cosa a destacar es que los empleados del motel en todo momento auxiliaron a las mujeres y actuaron notificando a la policía. Trascendió que incluso han proporcionado sin dilación la información y los videos de las cámaras de seguridad para robustecer las investigaciones.