Una trabajadora de la Dirección General de Vinculación Prevención del Delito y Relaciones Públicas, de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSP), de nombre Jeanine Desiree Oliver Fierro, denunció hostigamiento y discriminación por parte de sus dos superiores inmediatos. Aseguró que eso ocurrió a partir de que se enteraron que ella está embarazada, demás indicó que pretenden cansarla para obligarla a renunciar. Informó que por lo anterior ya interpuso la denuncia correspondiente en la Fiscalía General del Estado (FGE), y las correspondientes quejas ante la Secretaría de la Función Pública y ante la Comisión de Derechos Humanos.
La mujer, que ahora es madre de una bebé de apenas algunos meses aseguró que, en represalia por las acciones legales que ha tomado, sus mandos inmediatos la castigaron enviándola a hacer labores de policía operativo, pese a que ella es trabajadora administrativa y carece de experiencia operativa.
Cabe destacar que, por efectos de la praxis, muchos de los trabajadores de la Secretaría de Seguridad Pública cuentan con plaza “operativa”, sin embargo, en la realidad cumplen otras funciones. Por ello muchos administrativos tienen plaza operativa, aunque nunca hayan realizado acciones policiales, como es el caso de Jeanine Desiree.
En rueda de prensa que ofreció en un café del Centro de la Ciudad de Puebla, la afectada señaló que durante su embarazo sus mandos no tuvieron ninguna consideración con ella, pese a que cursaba un embarazo de alto riesgo. Indicó que incluso la mandaron a realizar acciones que exigían un esfuerzo extra para ella.
Una vez que dio a luz, no le asignaron algún lugar específico para poder extraer leche materna, por lo que lo tuvo que realizar en áreas comunes o en el sanitario. Esto, incluso, le ocasionó burlas por parte de dos de sus compañeros.
Una vez que procedió legalmente, con el argumento de que su plaza es operativa, aunque hace poco dio a luz, la cambiaron al área de operaciones policiales, aun y cuando ella siempre ha sido administrativa.
Lamentó que, en la secretaría se difunda que se protege a las mujeres en situación de violencia, y que sean los propios mandos medios, como el director general Jorge Cázares Salas y el director de prevención del delito Roberto Carlos Jurado, quienes violenten a sus propias compañeras de trabajo.
Jeanine Desiree, además de proceder legalmente ante las instancias antes mencionadas, también hizo un llamado a alguna asociación de abogados que pueda ayudarla y asesorarla, y a los grupos feministas, para que el caso llegue a ellos y puedan brindarle su apoyo y respaldo.
