El abogado José Alejandro Martínez Fuentes, hermano de Antonio Martínez Fuentes, a quien la Fiscalía General del Estado (FGE) identifica como “El Toñín”, aseguró que este no se dedica al robo de combustible, vive y trabaja en Palmarito Tochapan y ni siquiera ha sido citado a declarar por los delitos que se le imputa.
El litigante, dirigente de la Asociación Civil Fusión y Fuerza, ofreció este mediodía una rueda a algunos medios en un local de Palmarito Tochapan, en la cual aseguró que la dependencia confunde a su cosanguíneo con un primo que se encuentra preso en el penal de Tecamachalco desde hace dos años, acusado de los delitos de homicidio y robo, aunque no quiso decir si también se dedicaba al robo de hidrocarburos.
Pero a pesar de que a lo largo del diálogo con los periodistas insistió en varias ocasiones en que es falsa la versión oficial y mediática de que su hermano es un peligroso capo apodado “El Toñín” y que eso le ha causado a ambos y su familia un enorme daño, José Alejandro Martínez Fuentes, dijo que no procederán a demandar a la FGE por daño moral.
Reconoció que hay vecinos de Palmarito que por necesidad han sido enganchados por huachicoleros, pero descartó que exista en esa junta auxiliar de Quecholac una banda dedicada al robo de hidrocarburos de Petróleos Mexicanos (Pemex) y mucho menos de la peligrosidad que aseguran las autoridades.
En esa lógica, dijo que tras el enfrentamiento que hubo la noche del pasado 3 de mayo, el cual saldó con 10 muertos -4 soldados y el resto civiles, entre ellos un menor de edad-, la gente de Palmarito Tochapan ha sido estigmatizada como si todos fueran delincuentes, cuando la mayoría son personas trabajadoras, dedicadas al campo.
Afirmó que los pobladores inocentes han sufrido represalias como el retiro de programas de apoyo a ancianos y madres solteras.
Aseguró que en los patrullajes ulteriores a los hechos del 3 de mayo, el Ejército maltrató a los campesinos que laboraban el campo por la noche o en la madrugada.
Fuente: La Jornada de Oriente