Pobladores de San Andrés Calpan incendiaron una patrulla y un automóvil del municipio, además de que causaron daños a otras unidades y a las instalaciones de la presidencia municipal y la comandancia del lugar. Las personas dijeron estar hartas de la delincuencia y de que los policías dejen libres a los delincuentes. Exigieron la destitución del edil.

Los pobladores inconformes, señalaron que el edil actual Fernando Castellanos Hernández, ha sido incapaz de dar seguridad al municipio. Pedían hablar con él, pero el presidente no les dio la cara y el grupo de pobladores inconformes se tornó muy violento.

De acuerdo con una mujer que participó en la manifestación, este domingo por la mañana la policía municipal detuvo a tres presuntos ladrones, los cuales fueron plenamente identificados por la parte agraviada.

El afectado, como corresponde a su deber civil, acudió a la comandancia para proceder legalmente en contra de los rateros, pero al llegar y preguntar por ellos los uniformados le informaron que ya habían liberado a los delincuentes.

Esto es lo que nos dijo una vecina: “Nuestra respectiva queja y lo que estamos ahorita haciendo es porque soltaron a tres presuntos ladrones. Los encontraron en los hechos (en flagrancia) y la persona afectada vino a tomar cartas en el asunto (a proceder legalmente). Sin embargo, llegaron a presentar su denuncia, y los policías le dijeron que los habían soltado, que ya no había nadie que reconocer.

Esa es la molestia, cada uno de nosotros, de los ciudadanos, ha tenido robos en casa habitación y en nuestros negocios, incluso hasta en la calle a plena luz del día. Lo único que pedimos es que hagan justicia con los delincuentes, que si el presidente o los policías tienen vínculos con los delincuentes no los protejan” dijo muy molesta la mujer, quien señaló que hace poco fue víctima de robo en su negocio.

Fue un grupo de aproximadamente cien personas el que llegó hasta el lugar, ante la falta de atención el presidente, retuvieron a los policías municipales en el auditorio. Después el grupo de personas comenzó a romper los parabrisas de las patrullas y vehículos del ayuntamiento. Inmediatamente después le prendieron fuego a una patrulla tipo pick up y a un automóvil Chevrolet, Aveo, color rojo. Otras patrullas más terminaron con daños.

Luego el grupo de personas ingresó a las instalaciones en donde estaban retenidos los policías y los sacaron a golpes. Fuentes extraoficiales indicaron que los rijosos incluso robaron armas de cargo de la policía municipal, sin que se haya precisado cuántas.

En ese lugar se encuentran también las oficinas de la Fiscalía General del Estado, el comandante encargado del lugar fue atacado a golpes (aunque no es parte del ayuntamiento) y le robaron su arma de cargo y otras pertenencias.

Las cosas tuvieron un momento de tensa calma, cuando arribaron elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) con equipo antimotines, también llegaron elementos de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano.

Un representante, delegado, de la Secretaría de Gobernación del Estado fue el encargado de comenzar el dialogo con los rijosos y poco después consiguió que una comisión de diez personas accediera a dialogar con el edil Fernando Castellanos Hernández.

Este encuentro ocurrió poco antes de las seis de la tarde. Sin embargo, las cosas no salieron como las autoridades esperaban. No hubo acuerdo y la gente nuevamente se tornó violenta, atacaron a los policías y esta vez hubo más uniformados lesionados, algunos de los cuales requirieron de hospitalización.

Los inconformes señalaron que el edil Castellanos Hernández carece de una estrategia en materia de seguridad y en otras muchas áreas de su competencia. En entrevista, otros pobladores que no participaron en la revuelta, señalaron: “El presidente no ha hecho nada, queremos su destitución”. Estas últimas personas también indicaron, “el presidente no ha trabajado, por eso se cuelga de los programas federales”.

Hasta el cierre de esta edición no se conocía el reporte final y oficial sobre estos acontecimientos.