El director de Seguridad Pública de Chignahuapan, José Manuel Flores Ordóñez, fue cesado (aunque oficialmente se manejó como renuncia) de su cargo luego de la crisis de inseguridad que quedó expuesta desde el pasado viernes, cuando dos policías municipales fueron asesinados a balazos por un grupo criminal relacionado con el robo de combustible.

Las críticas en contra del alcalde Lorenzo Rivera Nava y su jefe de seguridad se acrecentaron cuando medios de comunicación locales revelaron que Juan Carlos Pérez Fernández, el director operativo de la policía municipal, el cual fue asesinado el pasado viernes, contaba con una orden de aprehensión vigente por el delito de homicidio calificado. Es decir que el alcalde de Chignahuapan puso la seguridad operativa del municipio en manos de un presunto homicida.

Ante las críticas que se han vertido a lo largo de la semana en contra de Lorenzo Rivera, se vio orillado a exigir la renuncia de su director de seguridad pública. Como encargado de despacho en el área de seguridad se quedó a cargo Juan Carlos Campos Zaragoza.

En el comunicado que emitió el municipio de Chignahuapan se asegura que en el tema de seguridad trabajaran de manera coordinada con el gobierno del estado, para garantizar la paz y la tranquilidad. En el comunicado también se reconoce el compromiso y apoyo del gobernador Miguel Barbosa Huerta para reforzar la seguridad del municipio.

Cabe señalar que el pasado viernes dos policías estatales y seis uniformados de Chignahuapan detuvieron a presuntos huachicoleros que conducían dos camionetas cargadas con combustible de procedencia ilícita. Miembros del grupo delictivo los fueron a rescatar y en el enfrentamiento abatieron a dos policías.

Los policías abatidos por los delincuentes, como este diario lo informó en su momento, son: Juan Carlos Pérez Fernández, quien ostentaba el cargo de director operativo de la policía municipal y ahora se sabe contaba con una orden de aprehensión vigente por el delito de homicidio calificado; y la policía Claudia Herrera Sosa.

Sobre los dos asesinatos de los policías, la Fiscalía General del Estado (FGE) ya avanza en las investigaciones para poder capturar a los responsables y fincarles responsabilidades. Al respecto, el gobernador Miguel Barbosa, ha adelantado que los responsables están plenamente identificados por lo que no se descartan prontas detenciones.