Son padre e hijo, los dos hombres cuyos cadáveres fueron hallados embolsados el jueves por la noche en calles de San José Las Flores, en el municipio de Amozoc. Trascendió que fueron privados de la libertad horas antes en el municipio de Tepeaca, de donde eran oriundos.

Como en este espacio se informó, el jueves alrededor de las diez de la noche, dos cadáveres embolsados fueron localizados en la calle 17 Oriente esquina con 18 Sur, en San José de Las Flores.

Policías municipales y estatales acudieron a atender el reporte y aseguraron el lugar de intervención. En el sitio se encontraron los dos cuerpos que, ahora se sabe, presentaban huellas de tortura y el tiro de gracia, es decir respectivamente un balazo en la cabeza.

Agentes investigadores de la Fiscalía General del Estado (FGE), adscritos a la Coordinación General Especializada en Investigación de Homicidios Dolosos y peritos en criminalística, acudieron para efectuar el levantamiento de los cadáveres. Los peritajes culminaron por la madrugada de este viernes.

Inicialmente los cuerpos quedaron en calidad de desconocidos, solo se indicó que correspondían a dos varones, los cuales mostraban huellas de violencia y destacaban los impactos de bala en sus cabezas.

Durante las diligencias, las autoridades observaron que en los domicilios cercanos había algunas cámaras de videovigilancia, sin embargo, los vecinos se negaron a colaborar con las autoridades y no les dieron acceso a las imágenes hasta que no regresaran con una orden judicial.

Se piensa que las cámaras pudieron haber captado el momento en que los cuerpos fueron abandonados en el sitio, y quizá de esa forma se tenga información del vehículo en el cual debieron haber sido transportados los cadáveres.

Fuentes policiales indicaron que, posteriormente familiares de los occisos acudieron a solicitar información. Los familiares habrían visto publicaciones en Facebook y por ello conjeturaron que podrían ser sus seres queridos que habían sido levantados previamente.

Trascendió que esas personas confirmaron que los occisos son padre e hijo y que ambos eran vecinos de San José Carpinteros en Tepeaca. Hasta el momento de redactar esta nota, se desconocía el móvil del crimen.